Los pozos huérfanos son una gran fuente de metano, así como de contaminación del aire, el suelo y el agua. Se llaman "pozos huérfanos" porque ya nadie quiere cuidarlos. Hay algunas cosas que los gobiernos pueden hacer para tapar los pozos huérfanos y garantizar que, en primer lugar, sea menos probable que se queden huérfanos.

Los gobiernos pueden trabajar con las empresas de petróleo y gas, así como con organizaciones sin fines de lucro , para priorizar el taponamiento y el abandono de pozos huérfanos. Esto puede implicar proporcionar financiación, incentivos o requisitos reglamentarios para alentar a las empresas a asumir la responsabilidad de los pozos que han abandonado.

Los gobiernos pueden establecer programas que brinden financiamiento o asistencia técnica para remediar pozos huérfanos. Estos programas pueden ayudar a cubrir los costos de taponamiento y abandono, y también ayudan con los esfuerzos de limpieza y remediación.

Las nuevas tecnologías, como las soluciones basadas en microbios y el mapeo sísmico 3D de alta resolución, pueden ayudar a localizar y remediar pozos huérfanos de manera más eficiente y efectiva. Los gobiernos pueden apoyar la investigación y el desarrollo de dichas tecnologías y proporcionar incentivos para su adopción.

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